Este libro no cuenta ningún cuento pero sí tiene protagonistas. Los personajes no son el tal Ramón empeñado en rimar rimas ni la princesa de los garbanzos. No. Este libro trata de letras y palabras. Letras y palabras que juegan a combinarse. Un juego al que te invitamos a participar. Veamos: ¿has pensado alguna vez en las palabras que más te gustan? ¿Y las que menos? ¿Te has fijado en que contemplada en un espejo la letra m sigue siendo m y en cambio la letra b se convierte en d…? Las palabras nombran las cosas y nos permiten imaginarlas sin representarlas tal como son. Sí estarían representadas tal cual en los dibujos y fotografías de un libro científico. Aunque lo más corriente es que un dibujante represente las cosas no como son sino como él quiere que sean. ¿No es estupendo? Cada cual puede ver la realidad según le plazca. Y para terminar, un secreto: los poetas quieren volar, ver el mundo desde arriba, lo más alto posible, que sus palabras suenen como notas musicales, como trinos. Los poetas quieren ser pájaros.
SOBRE LOS AUTORES
Pedro Villar Sánchez (Almansa, 1960) combina la escritura con su labor de maestro, actividad en la que ha desarrollado experiencias relacionadas con la poesía, la narrativa y el teatro. Dirigió la revista literaria Aljibe editada en Villena entre 1982 y 1985. Ha publicado los libros de poemas Desde la luz y la sombra (Ayto. de Almansa, 1991) y Luz en el laberinto (Aguaclara, 1995). Fue seleccionado en las antologías Escrito en Alicante (Diputación Provincial, 1986) y Alimentando lluvias (Inst. Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert, 2001).
Miguel Calatayud cursó estudios de Bellas Artes en Valencia. Desde 1969 compagina la ilustración de libros con distintas actividades de creación gráfica: diseños, cubiertas, carteles, colaboraciones en prensa, cómic, campañas institucionales, publicidad, etc. Entre otros premios obtuvo el «Lazarillo» de ilustración por Cuentos del año 2100 y el Nacional de Ilustración en dos ocasiones: por Una de indios y otras historias y por Libro de las M’Alicias. Fue candidato por España al premio internacional «Andersen» en 2000.