La conciencia es un concepto que ha sido objeto de estudio y reflexión en diferentes disciplinas, entre las que se encuentra la filosofía. La conciencia puede definirse como la capacidad de percibir y experimentar el mundo que nos rodea, así como tener conocimiento de uno mismo o de ser capaces de distinguir entre el bien y el mal y de tomar decisiones.
La ONU, que celebra el Día Internacional de la Conciencia el 5 de abril, estableció esta fecha para fomentar la reflexión y la acción en torno a problemas globales, así como para promover una mayor conciencia sobre la importancia de construir un mundo pacífico, justo y sostenible. Para ello, es imprescindible ser conscientes de diferentes problemáticas globales, como los conflictos, la desigualdad, el cambio climático o los derechos humanos. Para la ONU, tener conciencia sobre estas cuestiones permite que las comunidades actúen de manera más responsable y solidaria.
La conciencia en las aulas
En el aula de Filosofía, la conciencia puede servir como una herramienta para examinar críticamente las causas de los problemas globales y buscar soluciones basadas en valores éticos y humanos. Además, a través de la filosofía, se puede fomentar una mayor conciencia sobre nuestras responsabilidades hacia los demás y hacia el mundo en general, así como a promover comportamientos éticos que contribuyan al bienestar global.
A través de la filosofía, los alumnos se pueden exponer a una amplia gama de ideas, perspectivas y argumentos que los desafía a reflexionar sobre su pensamiento y creencias, al mismo tiempo que les permite analizar críticamente el mundo que los rodea y el lugar que ocupan en él.
Además, mediante el diálogo, podemos escuchar activamente las experiencias y las opiniones de los demás, de manera que conoceremos diferentes vivencias y desarrollaremos la empatía y la comprensión hacia los demás.
Trabajar la conciencia en el aula de Filosofía implica diseñar actividades y discusiones que ayuden a reflexionar y a comprender cómo la conciencia influye en la comprensión del mundo y en las decisiones éticas que tomamos.
Actividades para realizar en el aula
Explorar la naturaleza de la conciencia
Para empezar, podemos debatir qué entendemos por conciencia. Explorar diferentes definiciones y enfoques filosóficos como el dualismo, el materialismo o el idealismo. Además, siempre es útil aportar ejemplos y preguntar a los estudiantes por su perspectiva de diferentes temas de actualidad. Esta actividad puede derivar en ejercicios de introspección que les permita observar su propia conciencia, sus pensamientos y sus emociones.
Análisis de textos literarios y cinematográficos
Utilizar obras literarias y audiovisuales que exploren temas relacionados con la conciencia y la identidad permite a los estudiantes identificar y analizar cómo se representan estos temas en las obras y qué reflexiones filosóficas pueden extraerse de ellas. Para ello, se pueden utilizar películas como Memento, Matrix o El árbol de la vida o series como Altered Carbon, Dark, Black Mirror o Westworld.
Relación de la psicología con la conciencia
La filosofía y la psicología guardan una estrecha relación, por lo que introducirla en el aula puede ser interesante para presentar esta disciplina al alumnado. Para ello, se puede explorar cómo la conciencia se desarrolla a lo largo de las diferentes etapas de la vida y, al mismo tiempo, cómo la experiencia humana se relaciona con temas filosóficos como la libertad o la autenticidad.
A partir de esta idea puede ser interesante realizar entrevistas intergeneracionales, es decir, entrevistar a personas de edades diversas para explorar cómo han cambiado sus percepciones de la conciencia y la identidad a lo largo de sus vidas. Comparar y contrastar las respuestas de las diferentes generaciones y reflexionar sobre cómo influyen las diferentes experiencias puede ser muy enriquecedor para el alumnado.
Análisis de casos históricos y contemporáneos
Durante la historia encontramos numerosos casos en los que se han planteado cuestiones en las que la conciencia tiene un papel fundamental. Discutir cómo estas situaciones han supuesto un desafío y el papel de la moral en cada una de ellas les permitirá llevar la teoría a la práctica. Se pueden tratar tanto cuestiones históricas como contemporáneas, como por ejemplo el análisis de la inteligencia artificial, que actualmente se estudia desde diferentes perspectivas y sobre el que existe una gran división de opiniones.
Como vemos, desde una perspectiva filosófica, la conciencia puede entenderse como la facultad que nos permite experimentar el mundo, reflexionar sobre nuestra existencia y tomar decisiones informadas sobre nuestras acciones. A partir de la conciencia se construye nuestra experiencia subjetiva del mundo y de nosotros mismos.