Cada 21 de mayo, la ONU conmemora el Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo. La celebración de esta jornada pretende destacar «no solo la riqueza de las culturas del mundo, sino también el papel esencial del diálogo intercultural para lograr la paz y el desarrollo sostenible».
Según la ONU, «el 89% de los conflictos actuales en el mundo se producen en países con escaso diálogo intercultural. Por ese motivo, es fundamental reforzar el diálogo intercultural para forjar una cooperación eficaz y mantener la paz».
La conmemoración de este día puede ser muy útil para hablar sobre diversidad, diálogo y desarrollo en las aulas. De esta manera, a continuación, planteamos algunas cuestiones a tratar y diferentes actividades para realizar con el alumnado.
La diversidad cultural y la filosofía
«La diversidad cultural es una fuerza motriz del desarrollo, no sólo en lo que respecta al crecimiento económico, sino como medio de tener una vida intelectual, afectiva, moral y espiritual más enriquecedora».
https://www.un.org/es/observances/cultural-diversity-day
La filosofía se nutre de la diversidad de perspectivas, tradiciones y experiencias humanas para explorar preguntas fundamentales sobre la existencia, la moralidad, el conocimiento y la sociedad. Es decir, la filosofía abraza el pluralismo de ideas y enfoques, ya que reconoce que no existe una única verdad absoluta y que diferentes culturas y sistemas de creencias ofrecen una variedad de respuestas a las mismas cuestiones.
Por tanto, las preguntas fundamentales que plantea la filosofía en torno a la existencia humana no son universales ni en su formulación ni en sus respuestas. La diversidad cultural nos recuerda que las experiencias humanas son diversas y multifacéticas y que nuestras perspectivas están moldeadas por nuestras tradiciones, valores y contextos.
Así, puede ser muy enriquecedor para los estudiantes, exponer una amplia gama de tradiciones filosóficas, incluidas aquellas de culturas no occidentales, pues de este modo se promueve una comprensión más profunda de la diversidad de perspectivas y la riqueza del pensamiento humano.
Promover la inclusión y la equidad
Es fundamental que, además de exponer a los estudiantes la importancia de la diversidad cultural, nos aseguremos de que todos los alumnos se sientan incluidos y valorados, independientemente de su origen cultural, género, orientación sexual o cualquier otra característica. Para ello, es imprescindible garantizar el respeto mutuo y la igualdad de oportunidades, además de adoptar prácticas pedagógicas inclusivas cuando sea posible.
Actividades para realizar en el aula
- Fomentar el diálogo intercultural. Para aprender sobre diversidad es muy enriquecedor escuchar las experiencias de los demás. Para ello, se pueden organizar debates donde los estudiantes o docentes puedan compartir sus propias experiencias culturales y las ideas filosóficas que surgen de ellas.
- Realizar un viaje virtual. Gracias a los numerosos recursos multimedia que tenemos a nuestra disposición es posible acompañar a los estudiantes en un «viaje virtual» a través de diferentes culturas y períodos históricos, de manera que puedan explorar la filosofía a través de perspectivas diferentes a las suyas.
- Organizar proyectos de investigación cultural. Los estudiantes, de forma individual o en grupo, pueden investigar una cultura o tradición filosófica y realizar una presentación en clase en la que compartan lo aprendido. Pueden hacer hincapié en las diferencias con su cultura o en las contribuciones que ha hecho la cultura que han investigado al pensamiento filosófico global.
Al integrar perspectivas culturales diversas, fomentar el diálogo intercultural y promover un ambiente de respeto y apertura, es posible enriquecer la experiencia educativa de los estudiantes y prepararlos para participar activamente en un mundo diverso y globalizado.